Primera sesión con el Club de lectura de la Biblioteca Font de La Mina

En nuestra primera sesión de servicio dentro del voluntariado nos tocó estar con el club de lectura de la Biblioteca Font de La Mina. Nos encontramos con un grupo de participantes, eran cuatro y la educadora referente.

Al principio no sabíamos cómo orientar la sesión. Teníamos muchas dudas y no sabíamos si saldría bien, pero teníamos clara una cosa: queríamos que todo fuese dinámico y que, una vez acabada, no la definieran como una reunión pesada y aburrida. Decidimos empezar haciendo una lluvia de ideas y luego ya las organizaríamos. Ya nos habían adelantado que serían pocos adultos los que estarían en la sesión. Por ese motivo, al ser un total de cinco personas (sin contarnos a nosotras) fue mucho más fácil sobrellevar esas dos horas y organizar más fácilmente las ideas de las que os hablábamos anteriormente.

Como pensábamos que lo mejor era tener un primer contacto para que ellos nos conocieran a nosotras y viceversa, decidimos comenzar con un juego de presentación donde participáramos todos, nosotras incluidas. Consistía en lo siguiente: en un folio tenían que dibujar en medio algo que les identificara; y en las esquinas poner lo que les gusta hacer; de qué trabajan, de qué han trabajado o si están estudiando; cuál es la característica que más lo define; y qué es lo más importante para ellos en la vida.

Al final todos lo hicieron a su manera, pero no nos importó porque al final lo que queríamos era que se abrieran con nosotras y nos explicaran un poco sobre ellos. Gracias a la presentación de cada uno, tuvimos la oportunidad de conocer a Benita, Emilio, María José, Antonio y Jordi. En las dos siguientes imágenes podemos ver de manera más práctica en lo que consistió la dinámica explicada:

El primer papel corresponde a Emilio. Él decidió dibujar en medio una barca, ya que durante su vida ha sido pescador y toda su familia también. En cuanto a las esquinas, escribió la que había sido su profesión durante muchos años, es decir, pescador; le encanta el mar y considera que es su lugar de paz y donde puede evadirse un poco del mundo, así como caminar en silencio; una característica principal que le define es que es una persona soñadora; y por último, lo más importante para él es la familia.

Centrándonos ahora en el papel de Benita, a diferencia de Emilio, ella dibujó la casa que le hubiese gustado tener. En la esquina superior izquierda destacó que le gusta mucho la fiesta, y en la derecha puso dos de los hobbies que tiene: ir a la televisión de público e ir cada día a la piscina, aunque ahora mismo no pueda porque lleva unas semanas con dolor en el pie. En las esquinas inferiores, se definió a ella como una persona muy comunicadora, ya que habla mucho y nos explicó que durante toda su vida se ha dedicado a trabajar y a cuidar de sus cuatro hijos.

Además de explicar las palabras que ponían en sus papeles, se explayaron explicándonos anécdotas, que las recordaban con mucha intensidad y añoranza.

Una vez conocimos a los protagonistas de la actividad, creímos que era oportuno empezar la actividad preparada anteriormente. Esta consistía en sacar de un bol una o dos palabras por persona y explicar qué les producía esa palabra y qué relación establecían con el barrio.

Las palabras que elegimos poner son las siguientes: discriminación, agresión, desigualdad, ladrón, drogas, policía y armas. A las dos palabras que les dieron más juego para hablar, fueron drogas y armas. De ellas nos explicaron que ambas están muy presentes en el día a día de La Mina.

Nos sorprendió que normalizaran el hecho de tener armas como la pistola, pero, al mismo tiempo, se les hacía raro ver gente con armas de guerra en los tejados. A continuación, con relación al tema de las drogas, nos comentaron que en un futuro cerrarán el parque para los niños debido a que se han encontrado muchas jeringuillas por los suelos.

Hay una cosa que los participantes repitieron consideradas veces y es la falta de implicación de la policía, ya que solamente hacen acto de presencia una vez cada mucho, hacen poco y luego cuando vuelven a aparecer se dignan a hacer poco más de la mitad de lo que deberían hacer.

Por otro lado, desde su punto de vista, ellos consideran que los motivos por los que el barrio está en estas condiciones es a causa de la administración.

Seguidamente, después de haber conversado, decidimos que era el momento de empezar a tratar la noticia que se basaba en el instituto de La Mina, concretamente, cómo mejoraron los niños a raíz de la pandemia.

Queremos darle énfasis a partes concretas de la noticia con las que ellos no estaban de acuerdo. Un buen ejemplo es que la noticia destaca que los niños empezaron a tener mejores tecnologías después del COVID-19, y no fue así, ya que ellos ya tenían y sabían cómo utilizarlas.

No obstante, también es necesario recalcar el absentismo existente en el colegio de La Mina. Los niños no asistían a las clases. Cuando un niño destacaba intelectualmente entre los demás, es decir, cuando se le daba mejor adquirir los conocimientos y se veía reflejado en sus notas, le decían que se fuera a otro colegio porque en ese estaba perdiendo el tiempo. Del mismo modo, este colegio valora mucho la asistencia y los buenos comportamientos.

En otras palabras, tu buena calificación prácticamente se basa en si vas a clase y te comportas bien. Asimismo, hay días en los que llueve y los padres deciden no llevar a sus hijos al cole. De esta manera, los padres terminan haciendo que sus hijos se acomoden en casa.

Por otro lado, los participantes señalan que a los niños de este colegio se los trata de manera diferente. Ellos se refieren a que se les trata como si tuvieran un problema y no pudieran llegar al mismo nivel académico que los demás niños que viven fuera del barrio. Estuvimos mucho rato hablando sobre este tema y nos explicaron mucho más de lo que pensábamos. A través de sus palabras nos hicieron ver cómo era el día a día en el barrio. Nos lo mostraron sin tapujos ni disimulo. En pocas palabras, señalaron que lo básico en el barrio es ver, oír y callar.

Finalmente, nos acabaron de describir cómo creen ellos que es el barrio: por un lado, independiente; y por el otro, un caramelo para los medios de comunicación. Cuando hablan de independencia se refieren a que se consideran un barrio propio y no se sienten parte de Sant Adrià del Besòs. En cuanto a “un caramelo para los medios de comunicación”, se refieren al simple hecho de que los medios magnifican absolutamente todo lo que pasa en el barrio para lucrarse ellos mismos.

Les preguntamos si habían estado cómodos en la sesión, todo apuntaba que sí, pero al fin y al cabo necesitábamos saber lo que ellos opinaban. Por lo que nos comentaron, salieron satisfechos y estuvieron a gusto en todo momento con nosotras.

Cuando salimos de la biblioteca estuvimos hablando de nuestra opinión sobre la experiencia y concordamos en que al principio no sabíamos muy bien cómo iba a salir. Estábamos muy nerviosas y no confiábamos mucho en nosotras. Sí que es verdad que lo teníamos todo organizado, pero a veces las cosas no salen como queremos. A pesar de lo anterior, llegamos a la conclusión de que fue bastante bien y salimos muy contentas. En resumen, el buen ambiente que se creó y la facilidad que tuvieron para contarnos las cosas, nos impulsan a creer más en nuestras capacidades y en nuestra habilidad para dinamizar actividades.

Anna Berenguer y Paula Gallego.